Crímenes en el hielo: ¿qué pasa cuando se comete un delito en la Antártida?

La Antártida es el único continente del planeta sin población nativa. Únicamente unos pocos miles de investigadores residen allí durante el verano austral, y la cifra se ve reducida a menos de un millar cuando llega el invierno. Podría pensarse que la criminalidad en la Antártida es nula, teniendo en cuenta que los que allí residen son gente con una preparación excepciónal. Por supuesto, sería un error. En la Antártida también se producen crímenes. Robos, peleas, agresiones y hasta un asesinato. ¿Quién se encarga legalmente de perseguir y castigar a los culpables de un delito en la Antártida, un continente que no pertenece a ningún país?

amudsen-scott-base-aerial-2

Vista aérea de la Base Amudsen-Scott, junto al Polo Sur. Un criminal no tiene muchos sitios donde huir, teniendo en cuenta que el asentamiento humano más próximo está a más de mil kilómetros de allí. 

Seguir leyendo

Las cataratas de sangre de la Antártida

Corría el año 1911 y el científico australiano de origen británico Thomas «Grif» Taylor lideraba un pequeño grupo de exploración en la Antártida. Este grupo era parte de la famosa Expedición Terra Nova, que acabó en tragedia cuando su líder, Robert Falcon Scott, y todos los que iban con él, murieron en el viaje de regreso desde el Polo Sur, al que habían llegado apenas cinco semanas después que Roald Amudsen. Grif Taylor se encontraba explorando el glaciar que acabaría llevando su nombre cuando de repente halló ante él un espectáculo tan fascinante como aterrador: de un pequeño hueco manaba lentamente un líquido rojizo que teñía de un intenso carmesí el hielo de alrededor. Talmente parecía que el hielo estaba sangrando. Y ese fue el nombre que se le quedó al lugar: Las Cataratas de Sangre.

blood_falls_by_peter_rejcek-1

Las cataratas de sangre de la Antártida (fuente). Nótese la tienda de campaña a la izquierda de la fotografía y su tamaño respecto a la cascada.

Seguir leyendo

Los dominios geográficos más y menos utilizados de Internet

Un Dominio de Nivel Superior Geográfico (o ccTLD, por sus siglas en inglés) es el código de país de dos letras que aparece al final de algunas direcciones web. Por ejemplo, .es (España), .cl (Chile)o .mx (México). Se crearon a mediados de los años ochenta junto con los dominios genéricos .com, .net o .org, entre otros.  A diferencia de los dominios genéricos son gestionados por organizaciones en cada uno de los diferentes países. En total hay 248 dominios geográficos registrados en la base de datos del ICANN, la organización encargada de introducir los nuevos dominios en la red, entre otras muchas tareas. No sólo cada país independiente tiene el suyo, sino también cada región especial de las que aparece en el ISO 3166-1, que es el estándar internacional de la ISO referido a los códigos de países, basado a su vez en los boletines de la Organización de Naciones Unidas, razón por la cual Kosovo y otras naciones con reconocimiento internacional limitado no aparecen en la lista, mientras que deendencias y colonias como Åland, Gibraltar o Nueva Caledonia sí. La lógica dicta que los códigos de país más utilizados deberían ser los de los países más poblados, o al menos los de aquellas naciones con mayor número de internautas, pero la realidad desmiente al sentido común, una vez más. Lo mismo sucede con los dominios menos utilizados. Y ahora vamos a ver por qué.

cctld1

Seguir leyendo

Sesenta grados sur. Las islas de la desolación

El Tratado Antártico, que entró en vigor en 1961, blinda todas las tierras emergidas al sur del paralelo 60 contra las pruebas de armamento de cualquier tipo (específicamente el nuclear, pero no sólo ese) y declara la libertad absoluta de investigación científica en todo el territorio antártico. También, ya de paso, declara a la Antártida y territorios adyacentes como Tierrra de Nadie, congelando cualquier reclamación territorial al sur del paralelo sesenta y prohibiendo reclamaciones posteriores. Además del gigantesco territorio helado cuya forma nos es tan reconocible existen unos pocos cientos de islas afectadas por el tratado. Adicionalmente, hay una serie de islas, islotes y peñascos al norte del paralelo sesenta considerados como subantárticos. Estos territorios al norte y al sur del límite del Tratado Antártico suelen ser lugares entre poco y nada habitados, con climas que oscilan entre lo desagradable y lo repugnante y con flora y fauna de lo más entretenida, además de historias convulsas y, también,  interesantes. Hoy daremos una vuelta por las islas de la desolación. Bienvenidos al paralelo sesenta sur. Y alrededores.

mapa_subantartico

Seguir leyendo

Las quince islas desiertas más grandes de la Tierra

Según diversos estudios acerca de la psicología y la sexualidad masculinas, una de las fantasías eróticas más recurrentes entre los varones occidentales es quedarse varado en una isla desierta con la mujer de sus sueños o, mejor todavía, con varias mujeres. En el imaginario colectivo, una isla desierta es un lugar medianamente paradisíaco, con sus palmeritas, sus playas de arena blanca y fina y sus cocoteros de los que obtener leche fresca cuando uno lo desee. Bueno, pues siento decepcionaros. Ni una sola de las islas que hoy vamos a visitar siquiera se parece a esa isla desierta ideal. Si uno aterrizara en ellas con la mujer de sus sueños, probablemente fallecería junto con ella en menos tiempo del necesario para que alguien los echara de menos en casa. Hoy vamos a repasar la lista de las islas desiertas más grandes del mundo.

islaca

Si estás pensando en esto… vete olvidando. 

Seguir leyendo

Curiosidades y rarezas de los husos horarios (segunda parte)

(Para leer la primera parte, pincha aquí)

World_Time_Zones_Map

Mapamundi con todas las zonas horarias (clic para ampliar MUCHO)

El primer lugar del mundo en ver cada nuevo día es el archipiélago de las Islas de la Línea, que pertenece a Kiribati, y también Samoa durante el verano austral, pero, ¿cuál es el último? Hay dos respuestas para esta pregunta. Por un lado están Niue, un territorio que pertenece a Nueva Zelanda, y la Samoa Americana, una dependencia de Estados Unidos, situados ambos en la zona horaria UTC-11, es decir, 25 horas por detrás de Kiritimati y el resto de las islas del huso horario +14. Se da el caso de que las dos Samoas, la americana y la independiente, están separadas por apenas ciento cincuenta kilómetros de mar, pero por 25 horas de diferencia horaria, lo que permite, por ejemplo, celebrar el año nuevo en dos días consecutivos. Más allá están las Islas Howland y Baker, dos islotes bajo soberanía norteamericana situados en la zona horaria -12, la última del mundo, pero deshabitados desde 1942, cuando fueron bombardeados por la aviación japonesa en la II Guerra Mundial. Estados Unidos posee territorios en muchos husos horarios, pero hay un lugar que, en teoría, los tiene todos: la Antártida.

Antárdida-Husos-Horarios

Zonas horarias en la Antártida. La zona roja es Terra Nullius, o sea no reclamada por nadie, y por convención se le asigna la hora del meridiano de Greenwich.

Seguir leyendo

Los quince territorios más despoblados de la Tierra

En algún momento de los últimos meses la Tierra alcanzó los siete mil millones de habitantes, una cifra que multiplica más o menos por cuatro la que había cuando se hundió el Titanic, y por dos la cifra de de 1970. El planeta se llena y va a seguir haciéndolo en las próximas décadas, pero la distribución de la población no es ni remotamente equitativa por la superficie terrestre. Hay zonas donde es imposible dar un paso sin pisar a alguien (pongamos las piscinas públicas de Tokio o el Metro de Barcelona) y territorios donde podrías caminar semanas sin ver una sola persona. Territorios vacíos, o casi, zonas vírgenes, desoladas, completamente ajenas al trajín humano. El paraíso para cualquier misántropo. Hoy, en Fronteras, los territorios más despoblados del planeta Tierra.

No, si mal no se vive, lo malo es cuando me quedo sin tabaco o tengo que ir a pedirle sal al vecino

Seguir leyendo

El verdadero tamaño de los continentes

La proyección de Mercator, todavía una de las más utilizadas, si no la que más, era estupenda cuando el tipo que le puso nombre, Gerardo Mercator, la creó allá por el siglo XVI. Permitía trazar trayectorias loxodrómicas, que en cristiano quiere decir que una línea recta sobre el mapa equivale a un rumbo constante en la navegación. Perfecto para navegantes, descubridores y demás gentes de mal vivir. El gran problema es que la distorsión de las áreas es enorme, y es más grande cuanto más alejado del Ecuador se encuentre el territorio. Eso lleva a errores visuales evidentes, como se puede comprobar en el mapamundi sobre estas líneas, en el que Groenlandia (2 millones de kilómetros cuadrados) aparece notablemente más grande que África (30 millones). Una manera de evitar esto es usar otra proyección, como la Winker Tripel o la de Molleweide, mucho más precisas en lo referente a la superficie en las distintas partes del mapa. Otra posibilidad es comparar distintos territorios superponiéndolos en un mismo mapa. Y de eso va esta entrada.

Seguir leyendo

Un Volkswagen Escarabajo en la Antártida

La carretera del Polo Sur (fuente)

A finales del año 2006 se terminó de construir la Carretera del Polo Sur, la única carretera existente en la Antártida; se trata de un camino de nieve compactada de 1.450 kilómetros de longitud que discurre entre la Estación de McMurdo (esa que tiene un cajero automático)  y la base Amundsen-Scott, en el polo Sur. La construcción de la pista facilitó la comunicación entre las dos bases americanas y el traslado de material, combustible y demás recursos que, de otra manera, habrían sido transportados por avión. Vehículos oruga especializados recorren toda la enorme longitud de la pista en aproximadamente 40 días a la ida y mucho menos tiempo a la vuelta. Pero mucho antes de la apertura de la carretera, la Antártida fue hollada por los neumáticos de uno de los mitos de la automoción del siglo XX: el Volkswagen Escarabajo.

El Escarabajo Rojo de la Antártida (fuente)

Seguir leyendo

Lenin en la Antártida

Hace unos años la Peugeot anunciaba su 205 con el eslógan Contigo, al fin del mundo. En el anuncio para televisión, se podía ver el coche, junto con una simpática parejita, al borde de un océano de estrellas, representación simbólica de dicho finis terrae. A día de hoy el fin del mundo como tal sigue sin existir, salvo en la saga de Los Piratas del Caribe, pero hay un buen puñado de lugares que podrían ser definidos como tales.

Uno de ellos podría ser el Polo Sur, sino fuera por el pequeño detalle de que está habitado. La estación americana Amundsen-Scott lleva allí más de medio siglo, y en verano viven allí unas doscientas personas, que se reducen a unas cuantas decenas a lo largo del invierno austral. La estación tiene su propio aeropuerto, conexión a Internet, televisión por satélite y hasta una webcam en directo que se actualiza cada cuarto de hora. Por si fuera poco, se está construyendo una carretera que unirá el Polo Sur con la base americana de McMurdo, a unos 1.400 kilómetros al norte (obviamente) de allí. Vamos, que aquello no es Nueva York, pero conozco pueblos en Soria y Teruel peor comunicados, y, desde luego, con mucha menor actividad.

(Atención, pregunta. ¿Qué hora es en el Polo Sur? Dado que todos los husos horarios convergen en él pueden elegir tranquilamente entre los más de veinticuatro existentes. Sí, más de veinticuatro, otro día hablaremos de eso. La respuesta, al final de la entrada)

Seguir leyendo