Los largos viajes por carretera por puro placer son un invento norteamericano. Hay docenas de canciones, películas y novelas sobre el tema. Desde Viajes con Charley a Easy rider, el individualismo de los estadounidenses se ha manifestado a bordo de dos o cuatro ruedas durante mucho tiempo. Pero Estados Unidos, comparado con cualquier país europeo, es una nación muy joven. La catedral de Colonia o la Grand Place de Bruselas tienen más historia en sus piedras que cualquier ciudad americana. No se trata de la habitual condescendencia y presunta superioridad europea con los malvados yanquis, sino simplemente de la constatación de un hecho. Por esta razón, sus referencias a la hora de viajar suelen ser de otro tipo. Paisajísticas y urbanas, pero, sobre todo, frikis. El monte Rushmore, su hermanastro el monumento a Caballo Loco, o la misma ciudad de Las Vegas (y en general todo el estado de Nevada) son un par de ejemplos evidentes de lo kitsch que pueden llegar a ser. El extenso territorio estadounidense está plagado de obras de arte pop que reflejan el carácter americano, no tanto por su mera existencia, sino por su categoría de iconos de la carretera. Hoy veremos unos cuantos de ellos.
Una granja en la cuneta

Con seis millones de kilómetros de longitud, la red de carreteras de Estados Unidos es la más grande del mundo. Y esa categoría, world’s largest, es una en la que los norteamericanos han destacado durante decenios. El rascacielos más alto, la presa más grande, etc. En la América profunda, lejos de las grandes urbes, sin embargo, se encuentran obras que, siendo las más grandes del mundo en su categoría, llevan a preguntarse exactamente para qué han sido creadas. Por ejemplo, en Cut Bank (Montana), un pueblo de tres mil habitantes, se encuentra el autoproclamado como pingüino más grande del mundo. La escultura, con sus cinco toneladas de peso y sus nueve metros de alto, da la bienvenida a los visitantes (cuando funciona el altavoz), anunciando que el lugar es el punto más frío de los Estados Unidos continentales. En Hidalgo (Texas) encontramos la abeja asesina más grande del mundo. La ciudad se proclama (en consonancia con cierta tradición egocéntrica del país) como La capital mundial de la abeja asesina, y, para celebrarlo, colocaron una escultura de seis metros de largo en la puerta del ayuntamiento. Volviendo al norte, junto a la Interestatal 94 a su paso por Nuevo Salem (Dakota del

Norte) podemos apreciar a Salem Sue, la vaca frisona más grande del mundo, gracias a sus quince metros de largo por casi doce de alto, y a sus cinco toneladas y media de peso. Fabricada en fibra de vidrio, se construyó en 1974 para promocionar y homenajear a los ganaderos de la zona. Su inspiración directa fue el Búfalo-Más-Grande-del-Mundo, en Jamestown, a unos doscientos kilómetros de allí a través de la misma I-94, una enorme estatua de hormigón de sesenta toneladas de peso de un bisonte americano que mide 8 metros y medio de alto por catorce de largo.
La vaca de Nuevo Salem y el búfalo de Jamestown, en Dakota del Norte.
En la boca del pez
Otra de las instituciones populares americanas más conocidas es el Hall of fame, o Salón de la fama. En Estados Unidos hay docenas de ellos, dedicados a las más variadas actividades. Béisbol, cine, televisión, aeronáutica, automovilismo, inteligencia militar… En Hayward (Wisconsin), se encuentra el Salón de la fama de la pesca en agua dulce, un museo dedicado a ese deporte que cada año visitan cien mil personas. En él encontramos el pez más grande del mundo, un lucio de más de cuarenta metros de largo y doce de alto con plataforma de observación incluida en las fauces. No es el único pescadito colosal. Mucho más al sur, en plena Ruta 66, está la Ballena Azul de Catoosa (Oklahoma), un bicho de 25 metros de largo construido por el director del zoo de Tulsa a principios de los 70 como regalo para su mujer y para que jugaran sus hijos. Con los años se convirtió en un icono del medio oeste americano y, desde que los dueños se hicieron mayores, una asociación se encarga de reparar y pintar la ballena una vez al año
Pececitos de colores: el lucio de Wisconsin y la ballena de Oklahoma (más grande aquí)
Si Mahoma no va a la montaña…

Los japoneses no son los únicos que se dedican a coger algo en otro país, y reproducirlo en miniatura. A lo largo de la geografía norteamericana encontramos réplicas de muchos monumentos de todo el mundo, si bien donde más abundan es Texas. En Katy, muy cerca de Houston, se encuentran los Jardines Prohibidos, un parque temático financiado por un empresario chino en el que se pueden encontrar reproducciones a escala de la Ciudad Prohibida de Pekín, y, sobre todo, de los famosos guerreros de terracota de Xian. También en Texas encontramos un pueblo llamado París (que dio nombre a una película y argumento a un fantástico relato), en el que, como no podía ser de otra manera, existe una Torre Eiffel en miniatura. No es la única. En Estados Unidos hay catorce localidades llamadas París. Una de ellas está en Tennessee; allí encontramos otra torre. No es el único «homenaje» a un gran monumento europeo que hay en ese estado. En la capital, Nashville, se encuentra una réplica a tamaño real del Partenón de Atenas. Fue construida para la exposición universal de 1897, celebrada en la localidad, y permanece allí desde entonces.
Los guerreros de terracota de Texas, y el Partenón de Tennessee.
Volviendo a Texas, hay un pueblecito que merece ser mecionado. Se trata de Hunt, una localidad bastante pequeña que carecería de todo interés de no ser porque aloja una de las instalaciones más raras y eclécticas del estado. Se trata de Stonehenge II, una réplica del famoso monumento prehistórico inglés. Por si fuera poco encontrarse algo así en mitad de Texas, dos estatuas Moai, réplicas de las de la Isla de Pascua, fueron erigidas poco tiempo después como añadido a la atracción, que fue construida en 1990. Pero no es la única copia del famoso monumento inglés que encontramos en los EE.UU. Una mucho más extraña se levantó en 1987 cerca de Alliance, en Nebraska. Carhenge es una réplica de Stonehenge construida a base de coches antiguos absolutamente excéntrica. Tiene 29 metros de diámetro, y para su construcción se utilizaron 38 coches. Fue levantada por el artista Jim Reinders como homenaje a su padre, y lleva veinte años como uno de los iconos de la carretera más visibles de todo Texas.
Stonehenge II y Carhenge (click para ampliar)
El próximo día, más.
Si te ha gustado, menéalo.
Creo recordar que en Kansas City hay un centro comercial con una réplica de la Giralda de Sevilla muy conseguido también.
Aquí la foto de la Giralda de Kansas City.

De hecho, una de las avenidas más importantes de Sevilla se llama «Avenida de Kansas City» precisamente en homenaje al grillao que puso ahí la Giralda.
No me había acordado de ello, gracias por la referencia.
Muy buenas las fotos como Stongehenge
Ya llevo rato leyendo tu blog, la vdd es que muchas felicidades, me parece fantástico.
Sólo una cosita, te olvidaste de decirnos de dónde es la primera foto… (o yo soy muy güey y no lo vi, que tmb puede ser)
En Córdoba, Argentina, está La Francia, dónde también hay una reproducción de la Torre.
Bueno, la iglesia de mi humilde pueblo es 3 veces mas antigua que los Estados Unidos, pero hemos de reconocer el merito que tienen habiendo copiado todo lo que tenemos en esta Europa que tanto desprecian. Bueno, uno de sus principales símbolos como es la estatua de la libertad ni siquiera es suya, sino un regalo francés. El que mas me ha extrañado es el Carhenge, desde luego ahí cualquier «pirado» se hace famoso, aqui los marginaríamos.
En Santa Fe hay un templo masón inspirado en la Alhambra, y Acoma en Arizona tiene más de 1000 años, y sigue habitada. En los USA no hay muchos _monumentos_ viejos, pero sí cosas interesantes viejas, como Mesa Verde o Taos.
Antonio y Diego, existe esa Avenida en Sevilla y esa réplica en Kansas City porque ambas ciudades están Hermanadas,como Madrid con Manila (esto lo podéis ver fácilmente en wikipedia al final de cada ciudad que busquéis)
Me ha encantado la entrada!. La primera foto es muy bonita. Pero lo que es alucinante es el empeño de los estadounidenses en copiar cosas: lo de los guerreros de Xian se lleva la palma, y lo de la Giralda que comentan ahí no tiene desperdicio.
La verdad es que por lo menos se entretienen un rato haciendo todo e te tipo de cosas. Sería muy interesante hacerse un viaje viéndolas todas, lo malo son las distancias: absolutamente descomunales.
Deberían instaurarse rutas de estas culturales por Europa, aunque con el Interrail parece que la cosa funciona bastante bien y puedes disfrutar del paisaje en vez de estar conduciendo todo el día.
Como siempre los artículos a la altura de Fronteras.
Te deseo una muy feliz Navidad.
Un abrazo 🙂
Prueba
¿Te gustaría intercambiar link con mi Cuaderno de Viaje? Si quieres deja un post en mi blog. Saludos
Espléndido y curiosa entrada. Nunca dejan de sorprendernos estos norteamericanos. Como su mundo es su país, copian lo que les gusta y se quedan tan panchos. Seguro que piensan que la copia es superior al original.
Saludos.
잘 보고 갑니다.
HOLA
Al ver esta entrada (por cierto, enhorabuena por tu blog, llevo 2 dias leyendo y espero pulirmelo todo antes de que acabe el finde 😀 ), he recordado inevitablemente a una de las mejores aventuras gráficas de su tiempo : Sam&Max Hit the Road. Quien la haya jugado, sabrá inmediatamente porqué 😉
En Camas, provincia de Sevilla, hay una rotonda (1) con una reproducción gigante del «Bronce Carriazo»(2). Lo que todavía no me he enterado por que está en esta localidad. En Camas se hallo el «tesoro del carambolo» que figura en el escudo, pero si alguien me puede explicar esta rotonda le estaré agradecido..
(1)
http://asociacionlosdolmenes.blogspot.com/2010/05/terminada-la-rotonda-de-astarte-en.html
(2)http://www.museosdeandalucia.es/cultura/museos/MASE/index.jsp?redirect=S2_3_1_1.jsp&idpieza=346&pagina=1 Este azo
yo he hecho un fotolibro sobre algo parecido en España si te interesa puedes verlo aquí https://issuu.com/miguelangelmorenocarretero/docs/aaamaqueta_mecanismos_incoscientes_